Compartir en facebook
Compartir en twitter
Compartir en linkedin
Compartir en pinterest
Compartir en email

Voces internas: el pelele y el verdugo

Voces internas en guerra

Muchos llevamos un personaje pelele dentro, aunque intentemos esconderlo. Es un pelele ignorante, débil e inseguro. También tenemos un personaje verdugo (o juez) implacable que no soporta al pelele, y que lo trata con dureza y desprecio. Y entre estas dos voces internas establecemos una lucha sin cuartel, en la que el pelele huye despavorido y se defiende como puede, mientras el verdugo iracundo trata de alcanzarlo para erradicarlo como sea de dentro de nosotros.

Junto a estos dos personajes, tenemos otros que se asocian con unos o con otros. Los más típicos son las máscaras, que asumen diferentes roles artificiales para no parecer tan pelele y ser aceptado por el juez (y también por las demás personas). Porque al final, lo que tratamos de hacer con todas estas guerras internas, es llegar a una especie de equilibrio para no mostrarnos ni tan pelele ni tan negativo con uno mismo.

Y en estas dinámicas nos movemos la mayoría, intentando no mostrar nuestra vulnerabilidad, nuestra tontería, nuestras voces internas más absurdas y delicadas. Y por otro lado, siendo muy duros con nosotros mismos y con los demás, para mantener a raya nuestra expectativa de nosotros mismos y del mundo.

Voces internas en primera persona

Y aquí es cuando podemos pararnos un poquito…

Está muy bien leer un post y coger ideas interesantes. Pero hoy te propongo dar un pasito más. Conecta de verdad con el pelele de ti mismo. Siente tu debilidad, tu frustración, tu impotencia ante tantas cosas.

Déjate ser un pelele. No pasa nada. En realidad esto es solo una parte de ti. Tómate tiempo antes de seguir leyendo.

Si has permanecido un momento siendo pelele, seguro que también has sentido como una voz tuya trataba de convencerte de que en realidad no eres un pelele o que eso que sientes no tiene lugar en ti.

Déjate un rato ser este verdugo implacable que niega o que reniega de tu debilidad y tu dolor.

Tu guerra se hace manifiesta. Tu juez critico y duro al que no le gusta la blandura del pelele. Y tu pelele más dolido todavía por ser apartado como una mierda inmunda.

¿Qué sientes?

Tal vez ahora desprecies al verdugo y abraces al pelele. Tal vez sigas atrapado en el verdugo. No importa lo que ocurra, mientras puedas ver como se mueve tu interior ante estas cosas. No estamos señalando a algo anecdótico, sino al germen de gran parte de nuestras peleas interiores.

Amor acogiendo tus voces internas

Ver ya es un gran paso. Y podemos dar otro. ¿Qué necesita tu pelele?… e incluso más allá ¿Qué necesita tu verdugo? Si hablas con las dos voces internas enfrentadas, al final tal vez descubras que lo que anhelan es ser reconocidas en su valor único.

¿Realmente hay algo malo en tu pelele? ¿Y no cumple una función importante tu juez? Y aquí es donde puede aparecer una voz más profunda y amplia, que es capaz de ver la pelea con perspectiva y acoger a la vez tanto a tu verdugo como a tu pelele.

Tú eres amor. En realidad el pelele y el verdugo son aspectos de este amor que eres. Ver realmente tu debilidad es llenarte de amor. Ver tu deseo de cambio encerrado en un juez, es también conectar con tu amor transformador. Ambos son en realidad amor. Hacen su función de amor.

Respira pelele. Deja que el amor se haga pelele. Tu debilidad es tu riqueza. Tu muerte es amor que se entrega. La perdida es amor triste que valora la vida. Tu dolor es humanidad. Eres vulnerable y puedes respirarlo.

Respira verdugo. Deja que el amor se haga juez. Tu dureza es deseo de cambiar para funcionar mejor. Tu critico anhela el amor y está al servicio del amor. Tu ira es amor en acción, que corta lo que no funciona para despertar la belleza.

Respira amor. Tú eres amor. Tus distintas voces internas son aspectos de ti, aspectos del amor que eres. Y tu amor es tan entregado, que es capaz de vivir una aventura pelele para que despiertes a esta parte de ti que eres. Y tu amor es tan voluntarioso, que se manifiesta en un juez que no puede parar de desear ser aún más amor.

Cada parte de ti hace lo que puede y sabe. Es su muestra de amor infinito dentro de una vida finita. Agradezcamos a nuestros peleles, a nuestras máscaras, a nuestros jueces todo este privilegio de ser y aprender.

Gracias por acompañarme con tu lectura en este viaje que hoy necesitaba hacer y compartir. Espero escuchar si algo de esta vivencia resuena en ti. ¡Me encantaría!

Crédito de la imagen: Operación “Guernica” por Hersson Piratoba. Con licencia CC-BY-NC-ND

Compartir en facebook
Compartir en twitter
Compartir en linkedin
Compartir en pinterest
Compartir en email

5 comentarios en “Voces internas: el pelele y el verdugo”

    1. Hola Dori! Muchas gracias por tu comentario! Me alegro de que te identifiques con esto y que el acoger con cariño a ambas te inspire. No es fácil acogerlos, pero por ahí siento que va el camino.

      Para mi fue una revelación descubrir en mi estos personajes. Y la verdad es que los he despertado (conscientemente) en muy diversas dinámicas y experiencias de diferentes fuentes. La primera vez fue con un juego de mascaras neutras, en donde primero me identifique con una víctima muy muy pelele, y luego con un juez fuerte y prepotente. Y al final, con sencillas pautas, fui guiado hacia la integración de ambas desde el amor. Esto me marco un antes y un después…

      Un abrazo grande!

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Con mucho gusto te informamos que el responsable de tratar con cariño y transparencia la información que nos mandas es el Centro InterSer de Palencia, siendo la finalidad el poder ponernos en contacto y dialogar contigo en relación al Proyecto InterSer. Es por tanto tu legitimación y aceptación de la política de privacidad lo que nos da tu consentimiento para usar tus datos solo con estos fines de comunicación. Te contamos además que tus comentarios los alojamos y gestionamos con ayuda de WordPress. Puedes ejercer tus derechos de acceso, rectificación, limitación o suprimir tus datos en interser@interserediciones.com. Para más información lee nuestra política de privacidad. Gracias 🙂

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que tengas la mejor experiencia de usuario. Si continuas navegando estas dando tu consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies. Pincha el enlace anterior para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies
Ir arriba