Hoy quiero escribirte desde mis entrañas!!
Desde este espacio inmenso de autoestima profunda.
Y es que hace años tomé la decisión más importante de mi vida.
Decidí que yo era responsable de mi propia vida. Me di cuenta de que yo podía elegir con que acciones y con que valores quería vivir.
¡Hace años decidí dejar de ser una víctima! Decidí dejar atrás tanta dependencia y tanta impotencia. Decidí dejar de ser un niño bueno sin voluntad. Y asumir mi propia responsabilidad de mis aciertos y de mis errores.
Han sido años duros. No te lo niego. Ser libre tiene un precio y es el de sentir la ansiedad que genera elegir y actuar. Y también sentir la ansiedad de asumir las consecuencias de mis elecciones y de mis acciones.
Aparentemente es más fácil dejarse llevar por las decisiones de otros… por las acciones que dictan otros… pero a la larga perdemos nuestra propia vida. Y nos convertimos sin darnos cuenta en esclavos de lo que sucede fuera de nosotros…
Me forme como Ingeniero, pero decidí salirme del camino trazado por otros para dedicarme a lo que me apasiona, que es el desarrollo personal, escribir, inspirar, comunicar y acompañaros hacia dentro.
Recientemente tome este sendero de la autoestima profunda, ya que para mi es el tema clave de mi vida. Y decidí enfocarme en ganarme la vida por aquí, creando el blog y nuestras comunidades de aprendizaje con el taller y escribiendo la guía práctica de Autoestima Profunda.
Decidí enfocarme en esta dirección creativa. Actuar y arriesgarme.
Hoy siento la ansiedad de mis decisiones. Tengo voces en mi cabeza que me susurran… «Te has equivocado» «Esto no está saliendo bien» «El libro no se vende como esperabas»
Pero en realidad ¿Qué importan los resultados cuando he actuado con toda mi libertad, mi pasión, mi generosidad y mis valores?
Pase lo que pase estoy muy satisfecho de dar estos pasos por mi mismo. Soy protagonista de mi vida y asumo el miedo que esto me está generando.
Quien no arriesga. Quien no se da. Quien no vive su propia vida, tal vez tenga menos miedo, tal vez no sienta la frustración cuando las cosas no salen como espera… pero en realidad ¡NO VIVE!
Mi auténtico éxito, tu auténtico éxito, es decidir lo que queremos hacer con nuestras propias vidas y actuar con integridad. El resultado es secundario. El fracaso es secundario.
Lo importante es actuar con la autoestima profunda que da el ser libre y responsable de nuestros propios actos. Esta es nuestra decisión más importante.
¿Qué decides? ¿Qué vas ha hacer con tu vida? ¿Sigues implicado con ganas en tu propia autoestima profunda?
Muchas gracias por leerme hasta aquí. Por escucharme en mi grito profundo de dignidad y libertad. Espero que mi voz te llegue fuerte y mueva tus entrañas.
Te mando un gran abrazo desde mi libertad vulnerable.